Construyendo  soluciones

Señor Director

Las iniciativas que se están implementando para contener la violencia  y disminuir la delincuencia podrían favorecer la convivencia social y la seguridad ciudadana. El llamado fast track legislativo   pone en marcha una serie de medidas eficaces y oportunas.

Hay distintas razones  que condujeron al  desborde delictual, sin embargo, uno de los aspectos  olvidados ante esta explosión  criminal y delictual  se  fundamenta  en la pérdida de los valores,  del sentido de familia, de los límites, el sacrificio, la generosidad y otros.  Eso ha llevado a un caos sin precedentes  donde todo da lo mismo y la  vida no es más que un objeto que se toma y deja al arbitrio personal.  Se ha ido enquistando tan profundamente  en el modo de vivir de la gente que  se normaliza la barbarie y la deshumanización degradante. 

En tiempos de secularización tan extendida, donde llega a enaltecerse como valor indiscutible, llama la atención que algún sacerdote  entrevistado no ponga de  relieve la fe y la esperanza que debería caracterizarlo.  Inmenso es el daño para la juventud. 

Contrarrestemos la desorientación con  un cuerpo social comunitario que tenga por objeto visitar a los vecinos, conocerlos, conversar con ellos, interesarse por sus problemas y ayudarlos a construir su solución. Ellos tendrían la oportunidad de conocer, de primera línea, a las familias vulnerables, acompañarlas con compasión, compresión y amorosamente para invitarlas a   encontrar  salida  a la oscuridad  que les rodea y amenaza. Cuántas de ellas escondidas por su tragedia se hunden en el abismo por ausencia de un oído  bondadoso que las escuche.

Paternitas